A siete años de cárcel fue condenado Martin Arauz Hernández y una multa de un mil días por los delitos de corte, aprovechamiento y veda forestal y por la tala en vertientes y pendientes en el parque Nacional cerro Saslaya, en la reserva de Biosfera Bosawas, Siuna, región Autónoma de la Costa Caribe Norte.

Felipe Úbeda Prudo juez de juicio penal condenó a cinco años de cárcel y 500 días multa por el delito de corte, aprovechamiento y veda forestal,  y dos años y 500 días multa por el delito de tala en vertientes y pendientes.

La pena de siete años deberá cumplirse de forma sucesiva y deberá pagar en las cuentas del Sistema Penitenciario Nacional la suma de 49 mil 8760.12 córdobas.

En la sentencia se ordena que en compensación a los graves daños ocasionado el imputado deberá abandonar la zona,  retirar del lugar a las personas por el instalada, la demolición o desmantelamiento de todas las obras construidas, como  viviendas, cercos, cultivos, entre otros.

En la sentencia el juez ordena que el condenado debe realizar la siembra de árboles autóctono de la reserva.

Ramón Francisco Torres Urbina y Mario de Jesús Guido Herrera fueron condenados la semana ´pasada por la comisión de los mismos delitos ambientales en la reserva Bosawas.

En total tres personales han sido condenados en menos de quince días en Siuna, por el juez Felipe Úbeda Prudo titular del Juzgado de Distrito Penal de Juicios de Siuna en el caribe Norte.

Seven years in prison for environmental crimes in Saslaya National Park

Martin Arauz Hernández was sentenced to seven years in prison and a fine of one thousand days for the crimes of cutting, use and forestry closure and for cutting down slopes and slopes in the Cerro Saslaya National Park, in the Bosawas Biosphere Reserve, Siuna , Autonomous region of the North Caribbean Coast.

Felipe Úbeda Prudo, a criminal trial judge, sentenced to five years in prison and a 500-day fine for the crime of cutting, harvesting, and logging, and a two-year and 500-day fine for the crime of cutting down slopes and slopes.

The seven-year sentence must be served in succession and must pay in the accounts of the National Penitentiary System the sum of 49 thousand 8760.12 cordobas.

The sentence orders that in compensation for the serious damages caused by the accused, he must leave the area, remove people from the area due to the installed, demolition or dismantling of all the works built, such as houses, fences, crops, among others.

In the sentence, the judge orders that the condemned must carry out planting of indigenous trees in the reserve.

Ramón Francisco Torres Urbina and Mario de Jesús Guido Herrera were sentenced last week for the commission of the same environmental crimes in the Bosawas reserve.

In total, three personnel have been convicted in less than fifteen days in Siuna, by judge Felipe Úbeda Prudo, head of the Siuna Criminal District Court in the North Caribbean.

Comunicador/a Intercultural