Conmoción por el asesinato de madre e hija en Mulukuku

Madre e hija fueron asesinadas en la finca San Gerónimo en el municipio de Mululukú, en el Caribe Norte. Las féminas estaban desaparecidas y fueron encontradas sin vida a esos de las 2 de la madrugada de este jueves 22 de julio.

De acuerdo con la información los nombres de las victimas corresponden a Dayeris Boniche Gonzales (hija) y Maritza Gonzales Valle (madre), Dayeris fue encontraba ultrajada dentro de la habitación de su vivienda, mientras que la señora Maritza fue encontrada sin vida en el potrero de la finca San Jerónimo, propiedad de las victimas.

Se presume que el doble crimen fue cometido por el mandador de la finca Wilmer Antonio González Pérez, de unos 30 años, quien supuestamente es sobrino de doña Maritza, y lo había criado como a su hijo.

Según testigos ayer a eso de las seis de la mañana doña Maritza González, salió junto a Wilmer González, a ver un ganado a una finca cercana, donde nunca llegaron ya que la mató de tres balazos en una loma localizada entre ambas propiedades.

Seguidamente Wilmer González, se regresó a la finca Los Polonés, donde esperó a eso de las 9 de la mañana a que regresara la joven Dayrin Boniche, que había salido en una camioneta a entregar leche a Mulukukú.

Aparentemente cuando la joven llegó a la casa Wilmer, supuestamente la ultrajó para luego golpearla con un objeto contuso en la cabeza y la estranguló, para dejar el cuerpo en el piso cubierto con una colcha.

Posteriormente Wilmer González, llamó a un taxista para que lo sacara de la finca y lo llevara a Mulukukú, donde se presume abordó un bus para huir.

El hecho fue descubierto hasta en horas de la noche cuando los hermanos de doña Maritza no la localizaban y al preguntar a los trabajadores afirmaron que había salido a la finca  con Wilmer, y ya no la habían visto más al igual que a su hija Dayrin.

La policía continúa la búsqueda de Wilmer Antonio González Pérez, quien aparentemente ya tenía todo planeado ya que la semana pasada había vendido un ganado que tenía criando en la misma finca de sus víctimas.

Shock over the murder of mother and daughter in Mulukuku

Mother and daughter were murdered on the San Gerónimo farm in the municipality of Mululukú, in the North Caribbean. The women were missing and were found dead at 2 in the morning of this Thursday, July 22.

According to the information, the names of the victims correspond to Dayeris Boniche Gonzales (daughter) and Maritza Gonzales Valle (mother), Dayeris was found outraged inside the room of her home, while Mrs. Maritza was found lifeless in the pasture of the San Jerónimo farm, owned by the victims.

It is presumed that the double crime was committed by the manager of the estate Wilmer Antonio González Pérez, in his 30s, who is supposedly the nephew of Doña Maritza, and had raised him as his son.

According to witnesses yesterday at about six o’clock in the morning, Mrs. Maritza González went out with Wilmer González to see a cattle at a nearby farm, where they never arrived since she was killed by three bullets on a hill located between both properties.

Then Wilmer González returned to the Los Polonés farm, where he waited around 9 in the morning for the young Dayrin Boniche to return, who had left in a truck to deliver milk to Mulukukú.

Apparently when the young woman arrived at her Wilmer’s house, he allegedly abused her and then hit her with a blunt object on the head and strangled her, leaving her body on the floor covered with a quilt.

Later, Wilmer González called a taxi driver to take him out of the farm and take him to Mulukukú, where it is presumed that he boarded a bus to flee.

The fact was discovered until late at night when Doña Maritza’s brothers could not locate her and when asking the workers they affirmed that she had gone out to the farm with Wilmer, and they had no longer seen her as well as her daughter Dayrin.

The police continue the search for Wilmer Antonio González Pérez, who apparently already had everything planned since last week he had sold cattle that he had raised on the same farm as his victims.

Comunicador/a Intercultural