Siuna rinde homenaje a Bernardino Díaz Ochoa con conversatorio sobre su vida y legado

En un emotivo encuentro que congregó a docentes, se llevó a cabo un significativo conversatorio en Siuna para honrar la vida y el profundo legado de Bernardino Díaz Ochoa. Este campesino, cuya trayectoria de vida es un faro para las nuevas generaciones, fue recordado por su incansable labor en el campo y su firme llamado a la productividad agrícola, un mensaje que resuena con fuerza en la actualidad.
El conversatorio permitió al personal del centro educativo reflexionar y compartir sobre el impacto duradero que Díaz Ochoa ha dejado en el desarrollo agrícola y social de la región. Su visión de cultivar la tierra no solo como un medio de subsistencia, sino como un camino hacia la prosperidad y la autosuficiencia, fue destacada como un pilar fundamental de su filosofía. Este legado ha trascendido el tiempo, inspirando a miles de jóvenes en el Caribe Norte a seguir sus pasos, pero con una visión modernizada y tecnificada.

En honor a su memoria, miles de jóvenes de la región han tenido la oportunidad de tecnificarse y, consecuentemente, mejorar la productividad en las parcelas de sus padres. Esto ha sido posible gracias al Tecnológico Nacional Bernardino Díaz Ochoa, una institución que lleva su nombre y que ha sido clave en la formación de profesionales en el sector agropecuario.
El Tecnológico ofrece la posibilidad de obtener un título como técnico en diversas áreas, con un fuerte énfasis en la agronomía y la agricultura, preparando a los estudiantes con las herramientas y conocimientos necesarios para enfrentar los desafíos del campo moderno.

Jhondra López Mejía, docente del Tecnológico Nacional Bernardino Díaz Ochoa, compartió durante el conversatorio que Bernardino Díaz Ochoa no solo fue un campesino dedicado a labrar la tierra, sino también un excelente cooperativista y sindicalista. Esta faceta de su vida resalta su compromiso con la organización y el bienestar colectivo de los trabajadores del campo, buscando siempre condiciones justas y equitativas para todos.
Por su parte, Reynaldo Lora Canales, también docente del Tecnológico Nacional Bernardino Díaz Ochoa, enfatizó que Díaz Ochoa fue un productor ejemplar y un sindicalista incansable que luchó con vehemencia por los deberes, derechos y obligaciones de todos los trabajadores. Su defensa de la dignidad laboral y su búsqueda de la justicia social son aspectos que lo consolidan como una figura inspiradora, cuyo compromiso sigue siendo relevante en el panorama socioeconómico actual.
El conversatorio no solo sirvió para recordar a un hombre extraordinario, sino también para reafirmar el compromiso del Tecnológico Nacional Bernardino Díaz Ochoa con la formación de futuros líderes agrícolas y el fomento de una cultura de trabajo y desarrollo sostenible en la región. Su vida y obra continúan siendo un motor para el progreso, impulsando a las nuevas generaciones a abrazar la agricultura con pasión y conocimiento técnico.