Un buen carpintero en la memoria de Olga Ugarte Don Salvador Padilla
Salvador Padilla hijo, junto a su nieta e hijo de la nueva generación en Siuna.SNC/CORTESIA.
En la Siuna multicultural y plurilingüe en su época de oro muchos de sus habitantes actuales llegaron de otros departamentos del país en busca de mejores oportunidades de vida es así como Don Salvador Padilla llega procedente de Somoto departamento de Madriz y cómo todos los que radicaron en Siuna venían buscando la prosperidad del oro que se hallaba en abundancia en Siuna.
Era un señor bien parecido en sus años mozos y aun cuando yo le conocí conservaba el garbo de lo que había sido su figura, era de estatura normal, blanco de labios finos con su bigote que me imagino lo hacía verse más jovial e interesante tenía hijos creo de su primera esposa Carmen y Juan Padilla y luego con su segunda esposa doña Casimira con quien procreó 4 hijos: Rosalba, Margarita, Salvador y Porfirio Padilla.
Don Salvador era de oficio carpintero y de los mejores se dice que el junto con el Curro Gutiérrez, Valentín Gutiérrez creo Chico padre y alguien más que se me escapa fueron los constructores de la primera iglesia de Siuna que por cierto recuerdo era muy bonita tenía unas grandes columnas una amplia entrada y descansaba sobre unos pórticos creo eran cuatro robustos postes en donde descansaba el techo de la entrada la iglesia era pequeña pero muy bonita obra de estos carpinteros dirigidos por supuesto por don Salvador.
Luego siguió la construcción del colegio y el convento que me imagino ellos también la hicieron puesto que trabajaban en la carpintería del convento.
También según me contó su hija Rosalba trabajaba con los chinos de La Luz que le ordenaban trabajos para hacer o tal vez incluso la construcción de sus casas pues él tenía fama de ser un buen carpintero,
Su casa en Siuna era una de las mejores con grandes corredores, yo recuerdo que su esposa doña Casimira hacía una ricura de cajetas y tenía un mostrador en su sala donde tenía una urna de vidrio donde mostraba sus deliciosas cajetas rellenas de coco piñonate, huevo chimbo y tantas otras yo de chica llegaba a comprarle sus ricas cajetas.
Gente trabajadora y ejemplar como estos señores son dignos de mencionar y es por esa razón que los escogí para que conozcan nuestra tierra y sus habitantes.
Un saludo a los descendientes de estos señores quienes vivieron en nuestra amada Siuna y que conocieron mucho de nuestra historia porque llegaron y fueron de los primeros pobladores.
A good carpenter in the memory of Olga Ugarte Don Salvador Padilla
In the multicultural and multilingual Siuna in its golden age, many of its current inhabitants came from other departments of the country in search of better life opportunities, this is how Don Salvador Padilla arrives from Somoto department of Madriz and how all those who settled in Siuna They came looking for the prosperity of the gold that was in abundance in Siuna.
He was a good-looking man in his younger years and even when I met him, he kept the grace of what his figure had been, he was of normal height, white with thin lips with his mustache that I imagine made him look more jovial and interesting He had children I think of his first wife Carmen and Juan Padilla and then with his second wife, Doña Casimira, with whom he had 4 children: Rosalba, Margarita, Salvador and Porfirio Padilla.
Don Salvador was a carpenter by trade and it is said that he, along with Curro Gutiérrez, Valentín Gutiérrez, created Chico father and someone else who escapes me were the builders of the first church in Siuna which, by the way, I remember was very beautiful. large columns a wide entrance and rested on some porticoes. I believe they were four robust posts where the ceiling of the entrance rested. The church was small but very beautiful work of these carpenters led of course by Don Salvador.
Then the construction of the school and the convent followed, which I imagine they also did since they worked in the convent’s carpentry.
Also according to what his daughter Rosalba told me, he worked with the Chinese from La Luz who ordered him jobs to do or maybe even the construction of their houses because he had a reputation for being a good carpenter,
His house in Siuna was one of the best with large corridors, I remember that his wife, Doña Casimira, made a delicious dish and had a counter in her living room where she had a glass urn where she displayed her delicious dishes filled with piñonate coconut, chimbo egg and so many other girls I used to buy her rich boxes.
Hardworking and exemplary people like these gentlemen are worth mentioning and it is for that reason that I chose them so that they know our land and its inhabitants.
Greetings to the descendants of these gentlemen who lived in our beloved Siuna and who knew a lot about our history because they arrived and were among the first settlers.
Comunicador/a Intercultural
