Ante aumento de católicos abren nuevo seminario en diócesis de Estados Unidos
La Diócesis de Charlotte abrió un nuevo seminario para preparar a los sacerdotes del área, a causa del rápido aumento del número de católicos en la región.
La inauguración del Seminario de San José, realizada el 15 de septiembre, inició con los seminaristas cantando el “Salve Pater”, un himno latino que reconoce el cuidado amoroso de la Sagrada Familia. El Obispo de Charlotte, Mons. Peter Joseph Jugis, bendijo el nuevo edificio y expresó su gratitud a los 92 sacerdotes que actualmente sirven en la diócesis.
“Aunque hemos sido bendecidos con muchos sacerdotes buenos y santos, necesitamos más para satisfacer las necesidades de nuestro rebaño en rápido crecimiento”, dijo Mons. Jugis en un comunicado, según CNA, agencia en inglés del Grupo ACI.
“Por eso, es esencial que hagamos todo lo posible para ayudar a formar a los jóvenes para que estén listos para servir en nuestras parroquias cuando llegue el momento”, precisó.
Según Charlotte Observer, desde que fue nombrado Obispo de Charlotte en 2003, el Prelado ha priorizado los esfuerzos para aumentar el número de sacerdotes en la diócesis. A la fecha, la diócesis cuenta con 400 mil católicos, un número 10 veces mayor a cuando se estableció en 1972.
Con la inauguración, el seminario culminó la primera fase del proyecto de construcción, que inició en el 2018. “Hace dos años iniciamos el nuevo proyecto del seminario durante un descanso providencial de tormentas violentas”, señaló el seminario en una publicación de Facebook.
El año pasado, indicó el seminario, “instalamos una cruz hecha a mano al lado del seminario, mientras se construía. Hoy damos gracias a Dios por cortar oficialmente la cinta y bendecir nuestro nuevo seminario con el Obispo Jugis. ¡Nuestra Señora de los Dolores, ruega por nosotros!”.
El programa para formar nuevas vocaciones inició hace cuatro años en la iglesia católica St. Ann. En ese entonces, los seminaristas vivían en un antiguo convento y otras viviendas cercanas a la parroquia. Según Charlotte Observer, desde el 2016 el número de inscritos se ha triplicado.
“Esta es una estructura duradera que es tradicional y moderna, con belleza y funcionalidad, que esperamos inspire a las futuras generaciones de católicos en el oeste de Carolina del Norte, a continuar nuestra misión de compartir el Evangelio”, dijo el P. Matthew Kauth, rector del seminario de San José, según Gaston Gazette.
El proyecto del seminario costó cerca de 20 millones de dólares, tiene un estilo arquitectónico gótico, incluye 40 salas para seminaristas, una sala de conferencias, un refectorio y una cocina, aulas, oficinas administrativas, habitaciones para invitados, una capilla temporal y un paseo por el claustro meditativo. Hasta ahora los donantes han contribuido con 15,5 millones de dólares.
Los 27 seminaristas del Seminario de San José también asistirán a clases en el Belmont Abbey College. “El seminario de San José es un hito extraordinario para nuestra diócesis y para la región de Charlotte”, dijo Mons. Jugis, según Charlotte Observer.
“Es un lugar sagrado donde aquellos que se sienten llamados a servir a Dios pueden ser nutridos y cimentados en una fe que se mantendrá a lo largo de sus vidas”, concluyó.
Faced with an increase in Catholics, a new seminary opens in the United States diocese
The Diocese of Charlotte opened a new seminary to train area priests, due to the rapid increase in the number of Catholics in the region.
The inauguration of the Saint Joseph Seminary, held on September 15, began with the seminarians singing the “Salve Pater”, a Latin hymn that recognizes the loving care of the Holy Family. The Bishop of Charlotte, Bishop Peter Joseph Jugis, blessed the new building and expressed his gratitude to the 92 priests currently serving in the diocese.
“Although we have been blessed with many good and holy priests, we need more to meet the needs of our rapidly growing flock,” Msgr. Jugis said in a statement, according to CNA, the English language agency of the ACI Group.
“Therefore, it is essential that we do everything possible to help form young people so that they are ready to serve in our parishes when the time comes,” he said.
According to the Charlotte Observer, since he was appointed Bishop of Charlotte in 2003, the Prelate has prioritized efforts to increase the number of priests in the diocese. To date, the diocese has 400,000 Catholics, a number 10 times higher than when it was established in 1972.
With the inauguration, the seminar culminated the first phase of the construction project, which began in 2018. “Two years ago we started the new seminar project during a providential break from violent storms,” the seminar noted in a Facebook post.
Last year, the seminary noted, “we installed a handmade cross next to the seminary as it was being built. Today we thank God for officially cutting the ribbon and blessing our new seminary with Bishop Jugis. Our Lady of Sorrows, pray for us! ”.
The program to form new vocations began four years ago at St. Ann Catholic Church. At that time, the seminarians lived in an old convent and other houses near the parish. According to Charlotte Observer, since 2016 the number of registrants has tripled.
“This is a durable structure that is traditional and modern, with beauty and functionality, which we hope will inspire future generations of Catholics in Western North Carolina to continue our mission of sharing the Gospel,” said Fr. Matthew Kauth. , rector of the San José seminary, according to the Gaston Gazette.
The seminary project cost about $ 20 million, has a Gothic architectural style, includes 40 rooms for seminarians, a conference room, a refectory and a kitchen, classrooms, administrative offices, guest rooms, a temporary chapel and a promenade. through the meditative cloister. So far donors have contributed $ 15.5 million.
The 27 seminarians from Saint Joseph Seminary will also attend classes at Belmont Abbey College. “The San Jose Seminary is an extraordinary milestone for our diocese and for the Charlotte region,” said Msgr. Jugis, according to the Charlotte Observer.
“It is a sacred place where those who feel called to serve God can be nurtured and grounded in a faith that will continue throughout their lives,” he concluded.
Tomado de: ACIPRENSA